Tras el parón provocado por la pandemia, la Sección de Acción Deportiva de ARES volvió a retomar los trabajos de organización del Raid que, en esta ocasión, alcanza su décima edición.

Y lo ha hecho dándole un carácter más internacional, para lo que ha contado con la contribución de la Confederación Interaliada de Suboficiales de Reserva (CISOR), que ha permitido difundir la actividad fuera de nuestras fronteras.

La organización

Una actividad de estas características requiere de un importante esfuerzo de organización en el que, además de su director, Eduardo Escudero, se ha contado con la colaboración desinteresada de muchos socios, que han aportado ideas, esfuerzo y medios.

Ello se ha ido plasmando en distintas reuniones de coordinación hasta lograr una excelente planificación en todos los complejos ámbitos de esta actividad.

Inauguración del Raid

En la tarde del viernes 6 de mayo, las distintas patrullas fueron llegando al Polideportivo de Quijorna, que ha servido de Puesto de Mando en estos días. A las patrullas españolas se unieron otras de Países Bajos, Reino Unido y Suiza, como los vicepresidentes de CISOR de Dinamarca y Reino Unido, John Krøyer y Andrew Mitchell en calidad de observadores.

La ceremonia de inauguración tuvo lugar en el Salón de Plenos del Ayuntamiento de Quijorna, presidida por el alcalde de esta localidad y por el general de división Jaime Íñiguez Andrade, anterior jefe del Mando Conjunto de Operaciones Especiales del Estado Mayor de la Defensa.

Tras la bienvenida a los participantes, comenzó el briefing en el que se abordaron los detalles de la competición, así como los aspectos logísticos y de seguridad.

Desarrollo de la competición

No se había llegado a la media noche cuando las patrullas comenzaron sus ejercicios, desplegándose de forma escalonada. En sus recorridos tuvieron que superar hasta cuatro pruebas distintas y localizar dos puntos de control antes de alcanzar la zona de vivac.

Tras unas horas de descaso y poco antes del amanecer, se reinició el recorrido que, durante más de 25 km, avanzaría por los términos de Quijorna, Valdemorillo y Navalagamella. Este recorrido incluía nueve pruebas tácticas y otros tantos puntos de control.

Una parte de estas pruebas consistió en obtener las coordenadas de los controles posteriores o decodificarlas por distintos medios. Así se utilizaron comunicaciones por radio, el asalto a una posición defendida, la inmersión en una poza del río Perales o internándose en las galerías de una cueva-refugio vestigio de la Batalla de Brunete.

Otras de las pruebas que tuvieron que superar consistieron en el lanzamiento de granadas, un rapel en el muro de la presa de Cerro Alarcón y atravesar un angosto paso subterráneo.

Completaba el recorrido de esta fase una prueba de Cuidados Sanitarios Tácticos en Combate, cuidadosamente elaborada por nuestros colaboradores y patrocinadores Emergensa.

Según iba avanzando el día, a la dureza del recorrido y de las pruebas, se añadieron las altas temperaturas en la zona, que dificultaron aún más el avance.

De regreso a Quijorna, el recorrido se completó con una prueba de ejecución de un Check Point en la Plaza de la Virgen del Pilar, en el mismo centro de la localidad, lo que atrajo a numerosos vecinos y visitantes que disfrutaron de la pericia de los concursantes en la ejecución de este ejercicio.

Así fue discurriendo la tarde del sábado, mientras llegaban las patrullas, agotadas pero satisfechas del esfuerzo realizado.

Tras una reconfortante ducha y un breve descanso, en un inmejorable ambiente de camaradería, los participantes y organizadores degustaron unas cervezas en las magníficas terrazas de la localidad para, posteriormente, compartir la cena que ponía fin a la competición.

Ceremonia de Clausura

El domingo comenzó con el acto de Izado de Bandera y Homenaje a los Caídos, con todos los participantes en formación, y presidido por el alcalde de Navalagamella, acompañado de los vicepresidentes de ARES y de CISOR.

A continuación, se dio lectura a la clasificación de las patrullas, quedando en primer lugar la patrulla de Países Bajos, siendo la primera vez en las diez ediciones del Raid que alcanza la victoria una patrulla extranjera. Completaron el podio dos patrullas veteranas del Raid: Zulu y Lobo Gris.

Finalizada la entrega de premios, el director del Raid despidió a los participantes y miembros de la organización, felicitándoles por el esfuerzo realizado y el éxito del Raid, agradeciéndoles su participación y emplazándoles para la siguiente edición.

Conclusiones y agradecimientos

Cada edición del Raid nos deja un conjunto de “lecciones aprendidas” que contribuirán a hacer aún mejores las futuras ediciones.

Todos los participantes manifestaron su satisfacción por la competición, elogiando el entorno, el desarrollo de las pruebas y el recorrido, lo que, como Asociación, nos llena de orgullo y nos anima a trabajar en nuevas ediciones.

Solo nos queda dar las gracias a los participantes, en especial a los venidos de otros países, en un momento que la camaradería es más importante que nunca, a los socios que han colaborado en la organización por su esfuerzo desinteresado, a la Confederación Interaliada de Suboficiales de Reserva (CISOR), por su apoyo en la difusión internacional de esta actividad y su presencia en su desarrollo, a los ayuntamientos de Quijorna y Navalagamella y a sus gentes, por abrirnos las puertas de sus casas, y la las entidades colaboradoras, S4D, Emergensa, Vías Pecuarias de la Comunidad de Madrid y Soldiers por su impagable contribución al éxito de esta actividad.

¡Nos vemos el año que viene en el Raid ARES 2023!